A veces es fácil olvidar la importancia de cuidar nuestra piel y su rol protector en nuestro cuerpo, o pensamos que invertir en su cuidado es costoso y ni siquiera lo intentamos. Estos tips básicos nos demuestran que podemos lograr mucho con pequeñas acciones. ¡Toma nota!
Limpieza diaria
Retira los restos de sebo, suciedad, polución, productos aplicados y los propios residuos de la piel. Hazlo dos veces al día en tu rostro y una vez al día en tu cuerpo, con productos adecuados para tu tipo de piel.
Hidratación diaria
Utiliza sérums, cremas y un jabón aptos para tu piel. Aplícalos al menos una vez al día haciendo masajes con ambas manos. Y, ¡no olvides hidratar tus labios.
Protección solar
Sin importar el clima o el lugar, usar protector solar es algo que debes hacer a diario. Utiliza un producto con un índice de protección alto y una textura que se adapta a tu piel. Así evitarás manchas quemaduras, envejecimiento prematuro e incluso cáncer.
Cuidados semanales
Adiciona a tu rutina, al menos una vez por semana, estas actividades:
Exfoliación: Para ayudar a eliminar las células muertas de la epidermis. Exfolia tu cuerpo una vez a la semana, y en el rostro ten en cuenta tu tipo de piel: si tienes piel sensible hazlo cada 10 días; si tienes piel grasa hazlo una o dos veces por semana -si tienes acné no lo hagas-; y si tu piel es seca, una vez a la semana es suficiente.
Mascarillas: Aportan un cuidado intensivo según tus necesidades.Debes aplicarlas sobre la piel limpia y seca y, preferiblemente, después de haberla exfoliado para mejorar su eficacia. Durante el primer vez puedes aplicarlas una vez por semana y luego deberías hacerlo con menor frecuencia para favorecer el ciclo natural de renovación de la piel sin debilitarla.
Alimentación y otros hábitos
Bebe suficiente agua, lleva una alimentación rica en frutas y verduras que te aporten vitaminas y antioxidantes.
Evita consumir tabaco o alcohol.
Duerme bien: es clave para el descanso y la regeneración de la piel.
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